Pegatinas

En los años 70 y posteriores la propaganda de las organizaciones se generalizó utilizando una serie de elementos que hoy podríamos considerar objetos de merchandising, con el fin de hacer llegar al ciudadano las reivindicaciones concretas sobre un asunto determinado, en muchos casos o, simplemente, señalar la existencia de la propia organización dentro del panorama político y social del momento. Los elementos utilizados fueron diversos: encendedores, menaje del hogar, textiles, etc. Cualquier soporte era bueno para expresar. De todos los soportes probablemente por su sencillez y coste económico destacaron dos: las pegatinas y los pines (chapas en el lenguaje coloquial). El archivo desmemoriado posee una importante colección de estos documentos que nos pueden permiten, entre otras cosas, conocer a golpe de vista las inquietudes políticas y sociales del momento y apreciar la evolución que la comunicación política y social ha tenido a lo largo de los últimos años.

Desarma tus impuestos. Haz objeción fiscal.

Entre las campañas que desarrolló el MOC a partir de los años 80, la principal fue la objeción de conciencia al Servicio Militar, la Objeción Fiscal a los gastos militares fue otra de ellas. Con el paso del tiempo se ha convertido en un movimiento de desobediencia civil que se plasma en la disposición a no colaborar económicamente con el Estado, ni con los impuestos que nos obligan a contribuir al gasto militar.

No al pacto de la Moncloa

Los Pactos de la Moncloa se firmaron por los principales partidos políticos con representación parlamentaria en el Congreso de los Diputados entre el 25 y el 27 de octubre de 1977 a instancias del gobierno presidido por Adolfo Suárez (UCD) en la legislatura constituyente, con el apoyo de las asociaciones empresariales y los sindicatos. Pretendían, en un momento de crisis económica e inestabilidad política consolidar el proceso de transición. El Partido del Trabajo de España, al igual que otros partidos de izquierda que quedaron fuera del arco parlamentario y la CNT se opusieron porque entendían que las soluciones propuestas perjudicaban a las clases trabajadoras y cerraba la vía de ruptura con el Régimen franquista.

Paz , pan, libertad

Pegatina elaborada para la campaña de las Elecciones Generales de octubre 1982, en la Unificación Comunista de España pedía el voto con un lema clásico Paz, Pan y Libertad, acompañado de otro pegado a la actualidad del momento Ni Fraga, Ni Lavilla, Ni Otan, Ni fascismos. En esta segunda parte del lema,por un lado se descalifica a los candidatos de Alianza Popular (Manuel Franga) y de la Unión de Centro Democrático (Ladelino Lavilla), por otro recoge la oposión a la entrada de España en la OTAN el 30 de mayo de ese año, promovida por el gobierno de Leopoldo Calvo Sotelo.

Semana de solidaridad de las universidades europeas con la universidad española

El festival fue impulsado por Sindicato Democrático de Estudiantes Universitarios, próximo al Partido del Trabajo de España, la Organización Revolucionaria de Trabajadores y el Movimiento Comunista. La aspiración era congregar a más de cien mil personas a lo largo de siete días en los que las líneas conductoras fueran la cultura, la convivencia y el espectáculo. Para ello se invitó inicialmente a Jean Paul Sartre, Simone de Beauvoir, Louis Althusser, Pierre Vilar, Otelo Saraiva de Carvalho, Gabriel Celaya, Buero Vallejo, Lidia Falcón, Tierno Galván , Aranguren, etc. (Sartre por razones de salud y Saraiva de Carvalho, de agenda, parece que disculparon su asistencia y se comprometieron a enviar algún tipo de comunicación). Para el festival se hablaba de Joan Baez, Pete Seeger, Judy Collins, además de los grupos folk y cantautores españoles. El lugar elegido era el comprendido entre el Puente del Diablo y el faro de Cabo Mayor. El presupuesto rondaba el millón de pesetas y se pretendía la instalación de un camping temporal. El Gobernador Civil finalmente no dio la autorización para que se celebrara el Festival.